Antonio Sesé Andrés (Pedralba 1940) es un superviviente en el sentido literal de la palabra. Nació el 16 de febrero y fue criado por su abuelo hasta que con 4 años llegó a Moncada instalándose al lado del horno que había al final del carrer major llegando al ravalet.
Durante su infancia Sesé vivió una temporada en Campanar y ya en Moncada estudio en las Obreras de la Cruz. Conoció a su mujer Amparo también muy cerca de donde vivia en el ravalet. Se casaron en la ermita de Santa Bárbara. No tuvieron hijos, pero sus sobrinas Mari Carmen y Maria José son como sus hijas, quienes en estos momentos se ocupan de que no le falte nada.
Pocos días después de su boda, en los años 60, un accidente de moto le dejó postrado 40 días hospitalizado en coma. Hace veinte años fue intervenido de un tumor cerebral del que se ha recuperado sin apenas secuelas y más recientemente ha sufrido dos ictus que también ha superado.
Tras salir del coma se traslada con su su mujer Amparo a Suiza donde ella trabaja como auxiliar de enfermería en un hospital y el de obrero de la construcción.
Tras pasar seis años cerca de los Alpes regresan a Moncada y Antonio construye con sus propias manos la casa en la que vive en la calle Sevilla del barrio de los Dolores.
La naturaleza fuerte de Antonio hizo que a finales de los 80 se incorporase a la incipiente creación de la Agrupación local de voluntarios de Protección Civil de Moncada donde fue el primer voluntario y también durante muchos años la cara visible de un colectivo que en los últimos años ha visto reforzado su protagonismo en situaciones de emergencias y catástrofes como la dana del pasado 29-O.
Su dedicación y entrega a Protección Civil fue recompensada en 2011 con la distinción a nivel nacional por los méritos y buenas prácticas en el ámbito de las emergencias que firmó la directora general del organismo dependiente del Ministerio de Interior, título que luce con orgullo en una estancia de su casa, al igual que el uniforme naranja colgado, siempre dispuesto a salir para ayudar.
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