El próximo curso escolar 2025-2026 entrará en vigor la nueva ley de libertad educativa que aprobaron en les Corts PP y Vox que supone una enmienda a la totalidad de las políticas del Gobierno del Botànic en el campo de la educación.
El concejal de educación, Iván Bailach convocó a una reunión informativa este miércoles a los representantes de las AFAS (Asociaciones de Familias), conocidas hasta la fecha como asociaciones de madres y padres de alumnos, para dar traslado de la nueva norma que está previsto entre en vigor el curso 2025-2026. Bailach comunicó, que a partir del próximo curso según la nueva ley del Consell de Carlos Mazón serán los padres y madres los que tendrán que elegir la lengua base que quieren para su hija o hijo.


Entre los cambios introducidos por la ley está la recuperación de la doble línea en valenciano y castellano en los colegios, se homologará el C1 de Valenciano para el alumnado que saque un 7 en la asignatura en Bachillerato o en el examen de la selectividad y hará más fácil la exención de la asignatura de valenciano en las zonas castellanohablantes.
Votación directa de las familias
La ley de libertad educativa establece que serán las familias las que elegirán la «lengua base» de cada centro votando directamente. Si hay más de un 25 % de familias que desean dar clase en una de las dos lenguas se deberá crear una línea (una clase) para ello, aunque esto genera dudas de cómo se aplicará en localidades con pocos alumnos. Si no hay alumnado suficiente para hacer dos aulas, se dará clase en base a lo que vote la mayoría.
Con la ley actual de 2018 el Consejo Escolar era el encargado de fijar los porcentajes de la lengua base en función del área lingüística de la Comunitat. Lo que cambia esta nueva ley es que serán las familias directamente y mediante votación, las que elijan en qué lengua van a dar clase sus hijos.